Zapatos no somos todos,
que de amor ando descalza para no pisar tu sombra,
sorprenderte en los atajos y anunciarme de puntillas.
Aupada en estos pies planos, a tu corazón me encamino,
suela de carne y guijarro, libre de ufanos coturnos.
Aquí polvo allá gravilla, apoteosis del lodo,
mis huellas caligrafían
tu nombre en la piel del mundo.
Quítate los mocasines, dame a besar tus raíces,
deja que trepe el deseo por los desnudos talones.
Zapatos no somos todos, no te mueras de alpargatas,
mira que rondando noches jamás hubo luna calzada.
Tina Suárez
Viajo descalza, sintiendo las raíces para poder volar.
ResponderEliminarTu poema me encantó. Es libre!!